La mayoría de los seguros de salud son fiables de manera que responden eficientemente cuando el asegurado necesita hacer uso de cualquiera de las prestaciones que el seguro de salud garantiza. Hay que tener en cuenta que en este tipo de seguro se da una relación entre el cliente y el usuario en base a la cual este último tiene que facilitar también determinados datos a la aseguradora de salud. Así el asegurado tiene que actuar de manera diligente: debe entre otras cosas facilitar los datos previos a la contratación de una manera correcta y  veraz y también por otro lado debe utilizar los servicios médicos siempre y cuando lo necesite: cuando esté realmente enfermo, cuando necesite realizar una consulta, etc. Así no se puede decir que en realidad haya seguros más o menos fiables sino  que más bien hay muchas clases de seguros por lo que cada cual tiene que encontrar su mejor opción.